Ministros de la Unión Europea, que desempeñan un rol de alto perfil en la resolución del conflicto palestino-israelí, han programado un encuentro en Bruselas el lunes 7 de diciembre para avalar un plan que podría dividir a Jerusalén y convertir su parte este en la capital de un futuro Estado Palestino.
Ministros de la Unión Europea, que desempeñan un rol de alto perfil en la resolución del conflicto palestino-israelí, han programado un encuentro en Bruselas el lunes 7 de diciembre para avalar un plan que podría dividir a Jerusalén y convertir su parte este en la capital de un futuro Estado Palestino. Además del cierre potencial de parte de la ciudad a los no musulmanes, la propuesta socava el futuro del proceso de paz y elude negociaciones futuras.
La resolución, promovida por Carl Bildt, ministro de Asuntos Exteriores de Suecia y presidente rotativo de la UE, deja a un lado la política exterior existente de la UE sobre Jerusalén, que exhorta a una solución de dos estados que “deberá tomar en cuenta las preocupaciones políticas y religiosas de ambas partes, y proteger los intereses religiosos de judíos, cristianos y musulmanes del mundo entero”.
La propuesta de la UE implica también el reconocimiento de un Estado Palestino unilateralmente declarado. Esto refleja las recientes declaraciones del presidente de la Autoridad Palestina Mahmoud Abbas, que exhortó a dejar a un lado las negociaciones y a declarar unilateralmente un Estado Palestino.
Israel ha puesto en claro que quiere avanzar con las conversaciones sobre el proceso de paz. En un gesto de ese tenor, el primer ministro de Israel Biniamin Netanyahu exhortó el 25 de noviembre a un congelamiento de diez meses en los asentamientos de la Banda Occidental, para alentar a la Autoridad Palestina a retomar las conversaciones sobre el proceso de paz.
“Quiero decir claramente a los palestinos: Ahora es el momento de empezar las negociaciones”, dijo Netanyahu. “Ahora es el momento de avanzar hacia la paz. No hay más tiempo para perder. Hoy Israel ha dado un paso de gran alcance hacia la paz. Es el momento de que los palestinos hagan lo mismo.
Con respecto a Jerusalén, nuestra capital soberana, nuestra posición es bien conocida. No imponemos ninguna restricción a la construcción en nuestra capital soberana. Como siempre, estamos comprometidos con la protección de la libertad de culto para todas las creencias y aseguramos un trato equitativo para todos los habitantes de la ciudad, judíos y árabes por igual”.
El ministro de Asuntos Exteriores de Israel emitió una declaración en respuesta a la propuesta sueca, que alienta a los europeos a cambiar de foco y lograr que los palestinos tomen medidas para demostrar que están interesados en alcanzar la paz: “Después de las importantes medidas tomadas por el gobierno de Israel para permitir la reanudación de las
negociaciones con los palestinos, la Unión Europea debe ejercer presión sobre los palestinos para que retornen a la mesa de negociaciones. Pasos como los que promueve Suecia solo contribuyen a lograr el efecto contrario”.
Libertad de culto en Jerusalén
Desde que Israel asumió el control de Jerusalén oriental en 1967, el gobierno permite que el Wakf islámico administre el Monte del Templo (Haram al-Sharif en árabe). Los creyentes musulmanes tienen acceso libre y abierto al sitio, si bien la policía israelí puede restringir el ingreso cuando se producen incidentes violentos o cuando hay información de inteligencia sobre disturbios inminentes. Los judíos tienen prohibido rezar en ese sitio. Israel permite el acceso a los Santos Lugares a personas de todos los credos, tanto en Jerusalén como en el resto del país.
Persiste la preocupación con respecto al compromiso palestino de proteger los sitios religiosos. Por ejemplo, en octubre de 2000 los palestinos destruyeron el complejo de la Tumba de José cerca de Nablus. En ese mismo mes, palestinos atacaron y profanaron una antigua sinagoga en Jericó. Otro sitio judío, la Tumba de Raquel, cerca de Belén, ha sido atacado en numerosas ocasiones.
Entre 1948 y 1967 se demolieron 58 sinagogas en el Barrio Judío de la Ciudad Vieja y se destruyeron 38.000 lápidas judías en el Monte de los Olivos. Algunas de ellas fueron usadas para construir cercas y letrinas para el ejército jordano, y para pavimentar carreteras. Se destruyeron lápidas de más de 1.000 años de antigüedad. El gobierno jordano negó a todos los israelíes el acceso al Muro de los Lamentos y a otros sitios de culto.
Israel permite a personas de todos los credos el acceso a numerosos sitios sagrados en el país. La legislación israelí determina que todas las personas, independientemente de su pertenencia religiosa, tienen derecho a visitar todos los sitios sagrados en Israel.
Quien intentare estorbar este derecho estará sujeto a procesamiento penal y prisión de hasta cinco años, tal como lo estipula la Ley de Protección a los Santos Lugares aprobada por la Knneset (el parlamento israelí) del 27 de junio de 1967: “Los Santos Lugares estarán protegidos de profanación o cualquier otra violación y de cualquier intento de violar la libertad de acceso de los miembros de las diferentes religiones a sus respectivos sitios sagrados o a sus sentimientos hacia dichos sitios”.
Aspectos políticos y demográficos
El Plan de Partición de la ONU de 1947, que fue aceptado por el Movimiento Sionista, determinaba que Jerusalén sería un corpus separatum. Transjordania, junto con otros países árabes, rechazaron el plan de partición, atacaron a Israel y conquistaron la parte este de Jerusalén. En 1967, cuando Jordania atacó a Israel a comienzos de la Guerra de los Seis Días, Israel emprendió un contra-ataque y tomó control de la mitad este de la ciudad.
Algunos barrios judíos se crearon antes de 1947 al otro lado de lo que ahora se conoce como la Línea Verde. Neve Yaakov, situado en lo que ahora se considera Jerusalén oriental, fue creado en 1924 por sionistas que compraron esas tierras a una aldea árabe cercana.
Partes del barrio conocido como Sheikh Jarrah, o Shimon Hatzadik en hebreo, fueron compradas por judíos en 1876, que construyeron en ellas sus hogares. Cuando Jordania tomó el control de Jerusalén oriental en 1948, cientos de judíos fueron expulsados de ese barrio.
Según datos de 2005, la población de Jerusalén es de 719.000 habitantes: 464.000 judíos, 232.000 musulmanes y 15.000 cristianos.
La población judía de Jerusalén es mayoría relativa en la ciudad desde 1844 y mayoría absoluta desde 1896. En 1844, ivían en la ciudad 7.120 judíos, 5.000 musulmanes y 3.390 cristianos. Hacia 1896, la población judía había crecido a 28.112 almas, los residentes musulmanes llegaban a 8.560 y los cristianos a 8.748. En 1945, la población total de la ciudad era de 164.330 almas: 99.320 judíos, 33.680 musulmanes y 31.330 cristianos.
La construcción ilegal en Jerusalén oriental por parte de palestinos es financiada por la Autoridad Palestina, Saudi Arabia y otros países árabes, en lo que se ve como una política deliberada para influir sobre la situación en la ciudad. Hatem Abed El-Khader Eid, miembro del Consejo Legislativo Palestino, declaró que entre 1998 y 2002 6.000 viviendas se construyeron ilegalmente en Jerusalén oriental; la municipalidad de Jerusalén demolió sólo 198 de ellas.
Bajo gobierno jordano, la población de Jerusalén oriental creció en 860 personas de 1948 a 1967. A diferencia de ello, bajo gobierno israelí, la población musulmana de Jerusalén oriental creció de 66.000 a 229.000 personas de 1967 a 2006.
Reciente incitación palestina y eclesiástica en el Monte del Templo
El primer ministro palestino Salaam Fayyad dijo: “La respuesta del pueblo palestino proviene de la agresión israelí, y podemos perder el control de lo que suceda”.
El líder de la rama norte del Movimiento Islámico en Israel, el jeque Raed Salah said, dijo: “Liberaremos al-Aqsa (la mezquita) a sangre y fuego” y se mostró dispuesto a convertirse en “mártir” para proteger a al-Aqsa.”
El 9 de octubre de 2009, el Consejo Central de Fatah convocó a una huelga general en la Banda Occidental y la Franja de Gaza para protestar por “las medidas contra la mezquita de al-Aqsa”, y agregó que Israel estaba “asediando” la mezquita.
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