Fanatismo Religioso Ordeno la muerte de su propia hija...

Tulay, en una foto difundida por la policía.
Hace una década Tulay Gorem, una adolescente británica de origen turco, desapareció de su casa de Londres. Su cadáver no fue hallado y su nombre pasó a engrosar la lista de menores desaparecidos sin dejar rastro. Este jueevs, su padre y sus tíos se han sentado en el banquillo acusados de haber asesinado a la chica por haber perdido la virginidad. Tras años de silencio, su propia madre ha contado que todo fue un crimen de honor.
La desaparición de la chica, de 15 años, fue denunciada por su familia procedente de la zona kurda de Turquía y amigos en enero de 1999. Las investigaciones policiales llevaron a varias detenciones, incluso a la del padre, Mehmet Goren, pero fue liberado.
La familia decía que la chica había huido... hasta que el año pasado la madre de Tulay decidió hablar . En noviembre, el padre fue detenido acusado de haberla asesinado. Junto a él, arrestaron a sus tíos Cuma y Ali, acusados de haber ayudado al asesino.
Según ha contado el fiscal, Jonathan Laidlaw, en el juicio que ahora se celebra, Tulay había perdido la virginidad con su novio Hilal Unal, un hombre también musulmán que le doblaba la edad. Al parecer, la chica y su amado intentaron casarse, pero la familia no lo consintió porque el Unal pertenecía a otra confesión del Islam y, además, la chica estaba prometida con un primo suyo.
"El padre de Tulay estaba encorelizado y tenía la sensación de que su reputación y la de parte de su familia había sido destruida", dijo el fiscal. "Hilal era considerado en todos los aspectos como un novio y un marido inapropiado", añadió, según declaraciones recogidas por The Times.
En diciembre de 1998, la chica fue sometida a un examen para ver si era virgen porque el padre sospechaba que se había acostado con Hilal. Tras la prueba, la chica se escapó dos veces, pero acabó volviendo a casa de su familia. El 7 enero, su padre la secuestró y la asesinó.
Sobre los dos tíos de la chica, el fiscal ha dicho que el crimen no habría tenido lugar sin la "aprobación y permiso" de Ali, hermano mayor. Cuma, por su parte, habría ayudado a deshacerse del cadáver y eliminar pruebas.
Según la madre de Tulay —que testificará en el juicio— la joven fue enterrada en el jardín y, poco después, desenterrada y trasladada. El cadáver todavía no ha aparecido.