Este viernes los miembros de la iglesia ´Power of Christ Mission´ se llevaron una desagradable sorpresa
Al llegar al templo lo encontraron cerrado y precintado por la Policía Local, que atendió a la denuncia de varios vecinos. El problema era el excesivo volumen que, a su juicio, se escuchaba cada tarde a partir de las 19 horas desde el local.
El Área de Medio Ambiente del Ayuntamiento ordenó la clausura al comprobar que se superaban los decibelios permitidos. Los vecinos cuentan que el volumen de la música hacía temblar los muebles de las casas contiguas.
La iglesia, ´Power of Christ Mision´, situada en la calle Juan Fernández Suria de Málaga, producía un exceso de seis decibelios sobre los permitidos, aún a puerta cerrada. El documento de cierre, firmado por la concejala de Medio Ambiente, Araceli González, ordena el cierre de la iglesia evangélica hasta que se subsanen los problemas de contaminación acústica.
El decreto de clausura, fechado el 23 de octubre, contiene una orden expresa a la Policía Local para que vigile de forma periódica que el centro religioso permanece cerrado, y apercibe al titular del establecimiento de que puede acabar en los tribunales por desobediencia grave si no acata esta orden. El viernes, el local fue precintado.
LOS VECINOS, MOLESTOS
Los vecinos del vecinos del bloque en cuyos bajos se ha instalado esta iglesia evangélica han acogido con satisfacción la solución administrativa a un conflicto que arrastran desde hace más de un año. Para ellos, el exceso de volumen se producía entre semana, desde las siete de la tarde hasta las diez de la noche, y los domingos a partir de las 12 de la mañana.
Aunque dicen que los cánticos llegan a escucharse en el rellano del tercero, los vecinos de las dos primeras plantas son los más afectados, ya que afirman que el ruido es claramente perceptible dentro de sus viviendas. Algunos de ellos se mostraron muy afectados por la situación, como un inquilino del primero que se mostró muy crítico: «cuando uno llega a su casa sólo quiere descansar, y no escuchar ese ruido, como si fuera una feria. Por mí, encantado de que haya una iglesia, pero lo que no pueden es molestar a los demás».
EL PASTOR LO CONSIDERA EXCESIVO
El pastor de la iglesia, Miracle Isaac, no entiende que las «alabanzas a Dios» de sus doscientos feligreses pueda molestar a alguien. «No comprendo que lo consideren ruido. No son cánticos, nosotros sólo rendimos culto a Dios y no entendemos que eso pueda incomodar», explica.
Otros vecinos mostraron su malestar, al afectar a otras actividades como el estudio o el descanso. «Los muebles y hasta los vasos de la cocina vibran por el ruido», cuenta otra inquilina del segundo piso. «Tienen un equipo de megafonía -añade- que ya lo quisieran algunas discotecas».
Sin embargo, en opinión del pastor Isaac, el cierre obedece a otras causas. «No podrían hacer esto si se tratara de un templo católico. Es una lucha contra Dios, no contra mí», se lamenta.
Fuente: D. Sur. Redacción: ACPress.net
Comentarios
Publicar un comentario
IMPORTANTE: Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellas pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Aquel usuario que incluya en sus mensajes algun comentario violatorio del reglamento será eliminado e inhabilitado para volver a comentar.
DIOS TE BENDIGA